domingo, 6 de noviembre de 2011

Paciencia Ante los Cambios

A veces me pregunto ¿por qué no soy más simple? ¿por qué me complico la vida y me hago sufrir? 

Debo decirlo, ya no amo a mi ex (decir esto me quita un peso enorme de encima), aunque todavía me preocupo a ratos por él, porque sé que no lo está pasando nada bien; sin embargo, ya no lo amo, y eso me hace feliz. Recuerdo cuando todavía sentía que la vida se me iba cuando me alejaba de él, fueron meses de dolor extremo, y rogaba al tiempo que me ayudara a lograr que los sentimientos se volvieran insignificantes. Lo logré, aunque no sola, pero lo logré. En esos tiempos la paciencia me ayudó a no volverme loca y derrumbarme, me ayudó a resistir los comentarios de la gente, a mantenerme fuerte y seguir con mi vida.

Pero pasar por esa experiencia dejó marcas en mi personalidad, ahora me veo y hay aspectos míos que no logro reconocer, aspectos que yo en mi vida hubiera pensado tener, sólo el pensar que ahora no sé cómo manejar mi soledad, cuando antes disfrutaba de ella con un buen libro, viendo películas o haciendo mis trabajos, sin que me importara si recibía un mensaje o una llamada, me olvidaba de mi celular y de la computadora, vivía en mi "mundo konos". ¿Será que alguna vez volveré a sentirme a gusto con mi soledad?

Un nuevo amor me liberó del anterior... "Un clavo saca a otro clavo"... Pero los traumas y malas enseñanzas que el antiguo amor me dejó me están pasando factura. Los problemas no faltan, las tristezas menos, y ni se diga de las inseguridades, pero de cierta forma este nuevo amor, me entiende y me da el espacio para que yo pueda volver a mi equilibrio mientras que él se va acostumbrando a tenerme en su vida, creo que mi nuevo clavo se da cuenta que de cierta forma ni el ni yo estamos listos para una nueva relación, y yo aunque me demoré en entender esto, al final logré captar la situación en la que estábamos.

Quise tener con mi nuevo clavo lo que tenía con el anterior, quise obligarlo y casi lo pierdo. Siento que después de trabajarlo e ir con tino y esmero, logré que no se me fuera de las manos. Después del susto viene el gusto, y ahora yendo lento y pausado nos estamos queriendo, espero que el nuevo clavo sienta de nuevo seguridad de abrirse ante mí. Cuando yo empiezo una nueva relación con alguien, trato de dar lo mejor de mí, no lastimarlo y menospreciarlo... ¿A qué hora fallé? inconscientemente hice las cosas para recibir una compensación, y cuando no la recibía ARDÍA TROYA en mi interior, me equivoqué y aprendí que debo dejarme llevar por el viento, no apresurar sentimientos, y mas que todo darme mi espacio para curar las heridas que todavía están presentes... La paciencia lo es todo en cualquier aspecto de nuestras vidas.


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